Además de palacios subterráneos y ciudades prohibidas, China ofrece al visitante la posibilidad de descubrir centenares de maravillas milenarias, inmensas ciudades de neón, poblados en montañas remotas e impresionantes paisajes. Los atractivos del segundo país más grande del mundo en extensión son prácticamente incalculables, pero desde el blog de Allianz Assistance hemos seleccionado las 10 experiencias que no se puede perder quien tenga la suerte de viajar a China.
Diez experiencias que no te puedes perder si viajas a China
1. Ciudades imprescindibles
- Pekín: Imperdonable la visita al Palacio Imperial y a la Ciudad Prohibida.
- Shanghai: La ciudad más poblada del país y su principal centro económico y financiero ha encontrado el perfecto equilibrio entre tradición y modernidad. Los amantes de las compras, además, encontrarán aquí su paraíso.
- Xian: El antaño punto final de la Ruta de la Seda debe su fama mundial al célebre ejército de guerreros de terracota que se descubrió en sus alrededores.
- Hong Kong: Ciudad de contrastes y capital gastronómica de China: no decepcionan sus restaurantes de lujo pero tampoco la comida que se encuentra a pie de calle.
2. Caminar por la Gran Muralla China
La muralla más larga del mundo cuenta con más de 2.300 años de historia. En origen fue construida para proteger al territorio y a sus habitantes de los posibles invasores, y hoy en día es también un camino que atraviesa atractivos parajes. Badaling es la sección más visitada (hasta allí se desplaza la friolera de 70.000 turistas por al día entre los meses de mayo a octubre), por ser la más cercana a Pekín. Si buscas una visita menos masificada, puedes optar por Mutianyu, unos kilómetros más lejos.
3. Recorrer las tumbas de la dinastía Ming
En estos mausoleos están enterrados 13 emperadores de la dinastía Ming. Declaradas patrimonio de la Humanidad por la Unesco, la localización fue elegida en su día por inspiración directa de los principios del feng shui. Encontrarás una tumba por cada uno de los emperadores aunque no todas admiten visitas: si sólo tienes tiempo para una, elige la Dingling y recorre los salones del Palacio Subterráneo, a 27 metros bajo el suelo, cinco impresionantes habitaciones conectadas por enormes arcadas de mármol donde reposan más de 3.000 reliquias.
4. Redescubrir su gastronomía
Si tu paladar está hambriento de nuevas experiencias no saldrá defraudado de tu visita a China. Sacúdete los prejuicios y déjate sorprender incluso con los platos que (crees que) ya conoces: pato laqueado, chow mein, hot pot, dim sum…
5. Conocer a un panda
¿A quién no le gustan los pandas? En China alcanzan la categoría de tesoro nacional, aunque, actualmente, sólo quedan un par de miles de ejemplares de osos de esta especie viviendo en estado salvaje. Si quieres ver algunos de ellos de cerca, posiblemente el mejor lugar del mundo para hacerlo sea el Centro de Conservación de Chengdu, donde se realiza una encomiable labor en la lucha contra su extinción.
6. Encontrar el Gran Ejército de Terracota
El monumental ejército descubierto a 40 km al este de Xian está compuesto por 8.000 figuras a tamaño real de guerreros y caballos listos para la batalla, una inmensa comitiva llamada a proteger la tumba de Qin Shi Huang, el primer emperador de China.
7. Conocer el bosque de piedra Shilin
La que es una de las maravillas naturales más visitadas de China se encuentra a 85 km de la ciudad de Kunming. En ella, las piedras calizas parecen surgir del suelo creando la ilusión de formar un bosque de piedra. Se estima que cuenta con 270 años de antigüedad.
8. Navegar por el río Yangtze
El Yangtze puede presumir de ser el tercer río más largo del mundo. Surca 11 provincias y ciudades de este a oeste del país incluyendo Qinghai, el Tibet, Sichuan y Shanghai. Un crucero por el Yangtze te permitirá relajarte mientras descubres algunos lugares que no podrías alcanzar desde tierra firme: aldeas, templos, paisajes selváticos… Te impresionará, además, ver de cerca la Presa de las Tres Gargantas, la planta hidroeléctrica más grande del mundo.
9. Iniciarse en el Kung-Fu
El arte marcial chino, deporte tradicional en el país, se trata de una disciplina de lucha y cuenta con competiciones oficiales pero su filosofía tiene que más ver con la paz, la diversión y el mantenerse en forma que con la violencia. Tanto si quieres profundizar en tu conocimiento como si quieres acercarte al kung-fu por vez primera, en China podrás aprender de los auténticos maestros. Además, no te pierdas la visita al Museo de Artes Marciales y la Universidad de deportes de Shanghai para completar la experiencia.
10. Celebrar el año nuevo chino
La fiesta tradicional más importante del país hace mucho tiempo que ha traspasado fronteras, pero nada más auténtico que disfrutarla en su lugar de origen. En esta gran celebración, marcada por el calendario lunar, las familias se reencuentran y las entre fuegos artificiales, desfiles y danzas de dragones y el rojo como color oficial adornándolo todo. Eso sí, si tienes la suerte de viajar a China durante esta época del año busca alternativas al transporte público, ya que es impracticable.
Si tienes la suerte de viajar a China, no olvides contratar un seguro de viaje con amplias coberturas médicas antes de partir para disfrutar de la experiencia con toda la tranquilidad.
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