Los 5 mejores destinos europeos para escaparte en Semana Santa

Hacer escapadas en Semana Santa es todo un clásico para los amantes de los viajes. Esta época del año es perfecta para tomarse un respiro antes de las vacaciones de verano, una vez superada la resaca de las fiestas navideñas y la cuesta de enero. Si bien es cierto que el suelo patrio cuenta con atractivos suficientes para convertirse en destinos de Semana Santa cinco estrellas, no es menos acertado decir que hay multitud de ciudades europeas ideales para visitar estos días, si eres de los que gusta de aventurarse más allá de nuestras fronteras.

¿Estás pensando a dónde viajar en Semana Santa? El viejo continente cuenta con una gran cantidad de lugares que ofrecen atractivos turísticos únicos. Saca papel y lápiz y toma nota porque aquí te presentamos los 5 mejores destinos para escapadas de Semana Santa en 2023.

Praga es una ciudad con un encanto especial que ofrece una gran variedad de atractivos turísticos. Durante Semana Santa, podrás disfrutar de la Feria de Pascua en la Plaza de la Ciudad Vieja y pasear por el Puente de Carlos, uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. También puedes visitar el Castillo de Praga y el Barrio Judío -con sus seis sinagogas (Klausen, Alta, Española, Pinkas, Maisel, y Vieja-Nueva), el monasterio de Santa Inés y el cementerio judío como paradas obligadas- para conocer más sobre la historia y cultura de la ciudad. Además, la gastronomía checa es muy sabrosa y podrás probar platos como el goulash y la cerveza Pilsner.

La capital de Chequia se ha convertido en uno de los destinos de Semana Santa más populares de Europa en los últimos años. Con sus calles empedradas, sus antiguos edificios y su rica historia, es un lugar perfecto para los amantes de la cultura y la arquitectura.

Además de los reclamos ya citados, la ciudad ofrece una gran variedad de museos, galerías y monumentos históricos. Aunque si tienes que elegir, no dejes de visitar la catedral de San Vito, la iglesia gótica más grande del país que, además de dejarte sin palabras por su majestuosidad e imponencia, te regalará unas vistas increíbles de la ciudad si te animas a subir los escalones de su campanario. 

Budapest es una ciudad que combina la historia y la modernidad, y es perfecta para una escapada de Semana Santa. Durante esta época, podrás disfrutar de la Feria de Pascua en la Plaza de San Esteban y pasear por la Isla Margarita. Además, la ciudad es famosa por sus baños termales, como los baños Szécheny que son una experiencia única. También son parada obligada la Plaza de los Héroes, una visita al Parlamento húngaro y la Basílica de San Esteban, así como contemplar una panorámica de la ciudad desde la colina del Castillo de Buda.

Una buena opción para conocer mejor la idiosincrasia de las dos zonas en las que se divide la ciudad (Buda y Pest) es hacer alguno de los múltiples free tour que encontrarás por la capital húngara y que están disponibles tanto en inglés como en castellano.

Pero si lo que quieres es llevarte un buen sabor de boca de tu escapada de Semana Santa, no olvides disfrutar de la gastronomía húngara, con platos como el goulash y el strudel.

Por supuesto, no puedes irte de Ámsterdam sin dar un paseo por sus famosos canales. La ciudad cuenta con más de 100 kilómetros de canales, que son una maravilla arquitectónica en sí mismos. Incluso  puedes optar por tomar un crucero por los canales para tener una vista diferente de la ciudad.

La Plaza Dam -con el Palacio Real y la Nieuwe Kerk, una iglesia del siglo XV, como principales atractivos-, los mercados de flores, el barrio Rojo o los míticos coffee shop son otros de los reclamos de una ciudad sorprendente. 

Si el frío no es un problema para ti (aunque puede que no tengas que enfrentarlo demasiado si se trata de elegir dónde viajar en Semana Santa) Cracovia es una alternativa de lo más interesante.

La ciudad atesora siglos de historia y cultura y, cuenta entre sus atractivoso con un Casco Antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Aquí encontrarás la impresionante Plaza del Mercado, la Basílica de Santa María y el Castillo Real de Wawel, entre otros sitios históricos y arquitectónicos.

Otra parada obligada es la Fábrica de Schindler, que cuenta la historia de Oskar Schindler y su trabajo para salvar a más de 1.200 judíos durante la Segunda Guerra Mundial. La visita incluye una exposición sobre la vida en Cracovia durante la ocupación nazi, así como una visita guiada por la fábrica. En todo caso, el barrio judío de Kazimierz es otro lugar imprescindible para visitar en Cracovia y disfrutar de la deliciosa gastronomía polaca, con platos como el pierogi y el kielbasa.